La noria del famoso parque de atracciones de Coney Island vuelve a convertirse en escenario de una película y se llena de valor simbólico.
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Coney Island, nuevo escenario para Woody Allen
La película Wonder Wheel (Woody Allen, 2017) desarrolla toda su acción en el emblemático parque de atracciones de Coney Island, cerca de la ciudad de Nueva York. Y su título se refiere a la noria, uno de los principales iconos del lugar.
La noria de Coney Island se muestra en la película en diferentes momentos, desde distintos ángulos y con varios matices de iluminación. Pero siempre está ahí, inmutable mientras se desarrolla la acción.
Son muchas las historias de la gran pantalla que se han desarrollado en el parque de atracciones, pero Woody Allen decide utilizar la noria como un elemento especial y narrativo.
A lo largo de la película recibimos pequeños trozos de información valiosa para comprender las motivaciones de los personajes. Y muchos elementos de la trama se comportan de manera circular, volviendo sobre sus pasos en un giro constante (como el de la noria).
En la película, el fuego y el color rojo/anaranjado tienen un peso muy importante y se combinan con planos diferentes. Aparecen incluso en la banda sonora, donde destaca una versión de la canción Kiss of fire.
Por tanto, tampoco faltan los planos de la propia noria teñida de rojo, con rayos de luz anaranjada e irreal.
A nivel narrativo, la historia mantiene el estilo de otras muchas creadas por Woody Allen, pero le falta fuerza y no está a la altura de sus grandes joyas.
Parece que Woody Allen ha centrado toda su atención en la parte visual de la película (planos, iluminación, efectos de color, etc.) y ha dejado un poco de lado la historia.
Curiosidades sobre la noria de Coney Island y otras localizaciones de Wonder Wheel
La noria que aparece en Wonder Wheel tiene el mismo nombre y forma parte del parque de atracciones Deno’s Wonder Wheel Amusement Park. La noria fue diseñada por Herman Garms y se inauguró en 1920.
El bar de ostras de Ruby, otra de las localizaciones de la película, también es un lugar real y existe a día de hoy en Coney Island. Además, Woody Allen también muestra de pasada un plano fugaz de la famosa tienda de perritos calientes Nathan.
